La celebración tuvo lugar el 9 y 10 de mayo y convocó a clientes, artistas, exponentes de la cultura, reconocidos cocineros y amigos de la casa.
Casa Cavia festejó sus primeros diez años con la presentación de “La Celebración” una experiencia inmersiva ambientada en la década del 20, que combinó una obra de teatro con un menú especial. El guión fue creación de Santiago Swi y la producción estuvo a cargo de Guadalupe García Mosqueda, dueña y directora creativa, y de Julieta Caruso, cocinera de la casa.
El evento transformó Casa Cavia en un escenario vivo donde los asistentes fueron parte de una experiencia multisensorial que desafió sus percepciones y los invitó a explorar los distintos espacios de la casona de una manera completamente nueva. Así, a medida que se desarrolló la obra, todos los presentes pudieron degustar de exquisitos platos creados por Julieta Caruso, Catalina Rodriguez Triana y el equipo de La Cocina y cócteles de Flavia Arroyo y Pablo Zitarrosa, inspirados en el año en que fue creada esta casona, 1927. Además, Delvis Huck acompañó con una perfecta selección de vinos y espumosos.
La obra contó la historia de los vampiros que vivieron en la casa por cien años luego de haber sido encerrados por el rey debido a una disputa entre razas. Es en el encierro lo que desafía a esta familia de vampiros, a los que le fue prohibido beber sangre humana, a que desarrollen técnicas para alimentarse. “Bienvenidos a Le Cuisine”, de este modo, la anfitriona vampira fue la encargada de recibir en el hall a los invitados y llevarlos a disfrutar de una velada única.
Los comensales se sumergieron en la experiencia con tres propuestas. En una sala, una cata a ciegas los invitó a recorrer emociones a través de cuatro brebajes en donde el vampiro anfitrión argumentó “los humanos le dieron mucho poder a lo que se ve y perdieron conexión con lo sutil, los invito a que entren conmigo a viajar a través del olfato y el gusto”. Luego, los invitados pasearon por la casa hasta llegar al banquete. Allí, el anfitrión de la casa, Tomas Turín, desafió a todos a descubrir en los alimentos la misma belleza que tienen las obras de arte. En esta sala se pudo apreciar un gran banquete con comida típica de esta época donde todos los alimentos estuvieron dispuestos para comer con las manos: una cabeza de cerdo, pavo y pavita, ananá con jamón, frutas, ostras, huevos rellenos y cocktail de langostinos, entre otras exquisiteces.
Por último, en otra habitación, el hermano más estudioso de los Turín -investigador y poeta- propuso convertir lo ordinario en extraordinario. En este sector, los invitados, pudieron probar alimentos con diversas técnicas de fermentación como quesos, kombucha, caldos de hongos, y lo más novedoso … es que se pudieron comer las hojas de los libros de la biblioteca.
Para terminar, un baile de la época transportó a los invitados a esos tiempos de oro para luego finalizar con una fiesta y una especial degustación de dulces y cócteles, algunos de los cuales serán protagonistas de la nueva carta de Casa Cavia.
Casa Cavia -emplazada en una majestuosa casona de 1927, diseñada por el arquitecto noruego Alejandro Christophersen- recibió a lo largo de dos noches a más de 100 invitados quienes disfrutaron de una excelente puesta en escena con la actuación de Benjamín Alfonso, Pablo Kusnetzoff, Ariel Gangemi, Jimena D’urbano, Julieta Cosentino y parte del equipo de Casa Cavia.
Entre los invitados estuvieron presentes artistas, personalidades de la cultura, del arte y de la gastronomía, amigos de la casa y clientes que acompañan a Casa Cavia desde sus inicios. Entre ellos, el director Jose Maria Muscari, los chefs German Martitegui, Pedro Barguero, Maxi Rossi, Christina Sunae, Pamela Villar y Darío Gualtieri, los empresarios Federico Bonomi y Cynthia Kern, así como Jorge y Agustino Fontevecchia de Editorial Perfil.
“Casa Cavia es un punto de encuentro que reúne diversas disciplinas y que activamente borra los límites entre ellas, para que cada una se nutra de la otra a la hora de crear. Es un espacio de inspiración constante en el que repasamos la historia de distintos pueblos, partiendo de sus expresiones culturales. De ahí que, a través del cine, la música o la literatura, exploremos el sabor de algún lugar del mundo y nos traslademos allí en tiempo y espacio con nuestra imaginación. Gracias a todos los que nos acompañaron estas dos noches. Fue un enorme placer celebrar junto a todos ellos estos primeros 10 años de Casa Cavia”, comentó Lupe García Mosqueda.