La idea es simple, juntarnos el domingo 4 de octubre en el Planetario a hacer burbujas.
Entre tanta invitación a eventos que llegan a diario por Facebook (y a los que muchos ponemos asistiré casi por inercia), la de Santiago Destin Rossi no pasó desapercibida.
“Mi idea en la cabeza es que las burbujas llenen el Planetario y, de ser posible, que vuelen por todo Buenos Aires”, continúa este estudiante de Ingeniería química, payamédico y creador de Burbrujo que, también en Facebook, se presenta como un emprendimiento dedicado a la investigación, desarrollo, comercialización, producción, y todo lo que tenga que ver con Burbujas.
Este pibe vive en una burbuja?
Decidí escribirle para saber más de este acontecimiento tan efímero y mágico a la vez.
Santi contanos cuántos años tenés y a qué te dedicás?
Tengo 27 años, y soy estudiante de Ingeniería Quimica en la UBA, Fundador de Burbrujo y todo lo que tenga que ver con investigación, desarrollo y producción de burbujas y burbujeros, por lo tanto soy Burbujólogo. Soy Payamédico desde hace unos cuantos años, trabajo en una planta industrial en Escobar, mago de a ratos, entrenado musicalmente y hasta hace unas semanas vengo perdiendo el sueño intentando completar el Pokedex.
¿De qué se trata Burbrujo, cuánto hace que existe, cómo fue su origen?
Burbrujo se trata de burbujas gigantes, de burbujas chiquitas, de burbujeros normales y también los más estrafalarios. Es un emprendimiento que tiene un año solamente, pero que avanzó mucho en lo que es el desarrollo del líquido para burbujas, y cuando me preguntan a dónde apunta, siempre digo “a la fábrica de Willy Wonka”, un lugar divertido y donde se hacen cosas geniales.
El origen se remonta a mis primeros días de payamédico. Cuando arranqué a armar mi buenetin con los elementos que llevaría mi paya, el Dr. Clemente Covalente, el burbujero fue una de las primeras elecciones. Fue amor a primera vista, las burbujas eran geniales, eran mágicas, coloridas, felices. Pero cuando se terminó el líquido original que venía con el burbujero, las burbujas ya no salían como antes y llevó a mis primeras investigaciones sobre cómo solucionar esta falta. Pero este problema fue lo más fácil de resolver, lo complicado apareció cuando vi que se podían hacer burbujas de varios metros de largo, burbujas con las manos y meter hasta elefantes dentro de burbujas. Quería hacer todo eso y más.
Miré muchísimos videos en YouTube, hice muchísimas pruebas con detergentes e ingredientes de lo más exóticos y sin sentido. La cocina de mi casa fue un caos mucho tiempo y de alguna manera conseguía ensuciar con lo que se limpiaba. Hasta me fui a La Plata y tomé un curso de burbujas con un artista, que fue un buen inicio, pero no cumplía con mis expectativas respecto al líquido. Finalmente me puse serio y retomé la investigación desde libros, análisis serios de lo que estaba pasando con el líquido, y consultando en la facultad, lo que por suerte me llevo a hoy tener un excelente líquido de burbujas.
¿Cómo surgió la idea de hacer esta cumbre de burbujas?
Fue una combinación de cosas. Las pruebas del líquido las hago en parques porque el tamaño de la burbuja es tal que no puedo hacerlas en un patio, la gente que me veía hacerlas siempre miraba con mucho cariño las burbujas, y yo siempre estaba atento a sus reacciones. Luego el año pasado dí un taller de burbujas en el Payacongre que organizaba payamédicos, y me di cuenta que la reacción era completamente distinta, era más fuerte. Ahí me di cuenta, ver las burbujas es lindo, pero hacer las burbujas se siente genial, y cuando salen burbujas gigantes es total alegría. Desde ese taller es que cada vez que voy al parque a practicar me llevo un par más de burbujeros para que jueguen los que quieran.
Entonces surgió ese concepto de un evento que no fuera mirar a otros artistas hacer burbujas bonitas, sino que todos los que quisieran pudieran hacerlas y, con suerte, las disfruten tanto como yo.
¿Cuál fue la repercusión entre la gente? Comentarios?
La repercusión fue fantástica, y muy por encima de lo que esperaba en aceptación y participación. Hay muchas ganas de participar, muchos artistas de burbujas locales que van a venir con sus burbujas, hasta hay un señor que construyó una maquinita para hacer burbujas en el evento.
Se comentó mucho si lo hacía por alguna causa en especial, y respuesta fue “lo hacemos porque es divertido”. Pero lo que más se preguntó en el evento es si hay una receta para hacer burbujas, y yo siempre digo que la receta de las burbujas está en el mismo rubro que la fórmula de la Coca-Cola, y el código de los magos, no se divulgan. Igualmente, dejé en el evento una receta de mis primeros días, que es sumamente efectiva para burbujas gigantes y que se puede hacer con elementos fáciles de conseguir.
¿Contás con el apoyo de alguien o estás solo en esta cruzada burbujera?
Siempre estuvo el apoyo de la familia y los amigos que me decían que continuara con mi delirio burbujístico. También la gente de payamedicos me incentivo mucho a continuar con esto. Ahora en noviembre voy realizar una ponencia en el payacongre de Córdoba, sobre un aspecto fisicoquímico y artístico de las burbujas. El emprendimiento lo llevo, por ahora, yo solo, pero definitivamente en el camino voy muy acompañado.
Es necesario inscribirse, qué tenemos que llevar?
El evento no tiene inscripción, recomiendo llevar burbujero y líquido, y a los padres que van con chicos sugiero que lleven también su propio burbujero, mi experiencia dice que los grandes también terminamos jugando con los juguetes de los chicos. Yo igualmente voy a llevar varios burbujeros gigantes, y líquido para compartir, hay muchos otros artistas que harán lo mismo.
¿Te dicen que vivís en una burbuja?
Si, también me dicen que no crezco nunca y que vivo en una nube de delirios. No niego ninguna, pero mi burbuja en la que vivo es cada vez más grande y bonita.
¿Qué es #loqueva?
Lo que va es jugar, y en particular hacer burbujas, hacerlas siempre que se pueda, si pueden en el evento genial, y si después del evento las siguen haciendo mejor todavía. Todos tendríamos que poder dedicarle un ratito cada día a jugar un poco, en mi ratito yo juego con burbujas.