Esta intervención artística vendría a ser parte de nuestro amado #bombing, que es la interacción de ilustraciones o pinturas con su entorno, y del que te hemos hablado en estas notas en loqueva.
Sólo que en este caso el artista urbano Nikita Nomerz decidió intervenir estructuras y edificios abandonados que encuentra a los largo de su Rusia natal, para dotarlos de vida. Nomerz agrega ojos, narices, bocas y demás rasgos faciales a estos objetos o lugares olvidados, de manera que parezca que miran a los transeúntes e interactúan con quien los ve. La inspiración en su punto justo, el juego con el espacio y el entorno, la creatividad al poder.
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