A sólo días del lanzamiento de su segundo álbum de estudio, Happier Than Ever, Billie Eilish acaba de presentar una atractiva versión en vivo de “Male Fantasy”, una canción suave que aparece al final su reciente disco, el cual recibió numerosos elogios.
En el video, Eilish aparece sentada en una cama de satén color crema con un edredón acolchado dorado. La famosa cadencia de susurros de su voz fluye hacia un micrófono negro, llenando la habitación de hotel vintage de color ámbar que la rodea. Al otro lado de la habitación está su hermano Finneas, que toca una guitarra acústica blanca mientras está sentado encima de una cómoda de marfil.
La performance se grabó en película de 35 mm, por lo que su imagen es de un grano suave, que lo hace más intimista. La canción trata sobre la soledad después de una ruptura. Pero lo que es más poderoso es el mensaje de la canción sobre la curación de esta situación. “No puedo olvidarte, no importa lo que haga / sé que debería, pero nunca podría odiarte”, se hace eco de las últimas líneas de la canción.