El Coronavirus, y su consiguiente cuarentena obligatoria (y casi eterna), han cambiado la historia. Costumbres, hábitos, salidas… ya nada será como antes. De eso no hay duda. Y el mundo del arte, no escapa a esta triste realidad que afecta a todos. Se desconoce cuándo volverán a abrir los museos. Pero, pese a esto, y en el día sesenta y pico de confinamiento, acá estoy, en una galería recién inaugurada. Es blanca, luminosa, y me rodean obras de tres grandes artistas: POMS, creador del espacio, Felipe Pantone y Nase Pop. Estoy dentro de la primera galería virtual del país. Se llama Galería Mi Mente y acá puede entrar quien quiera y cuando quiera.
“Se trata de un proyecto colaborativo, creado para poder exponer de manera virtual, para que todo el mundo pueda visitarla, a cualquier hora y desde cualquier lugar. Sin horarios y con muestras para siempre”, cuenta POMS
“El futuro, o el presente en realidad, del mundo del arte y su lógica de funcionamiento tiene más que ver con el trabajo en equipo y lo colaborativo, más que con roles tan estancos“, cuenta Vic Tolomei, curadora y mucho más en esta galería. “Hacía tiempo que no curaba una muestra, (lo hice durante 5 años en la Fundación ICBC y después de manera independiente), y principalmente no lo hacía porque no encontraba mucho mi lugar. Me parece que esa propuesta tan dirigida a roles como “el curador”, “el artista”, ya fue, siento que el futuro va por otro lado, y un poco esta crisis viene a dejar en evidencia eso no?, como que el sistema artístico está caduco, como otros tantos sistemas”
“Así fue que le propuse a POMS fue que seamos un equipo donde incluso pensemos nuevos roles. Porque además si es una galería de arte virtual debería tener otra lógica y otra forma de relacionamiento y de pensar su propuesta de experiencia, y eso es en equipo. Esto es desde un programador, una persona a cargo de realidad aumentada, un curador, un retocador, un comunicador, un montón de roles que pueden participar de una exposición virtual”, dice Vic Tolomei.
“La galería va a contar con la participación de artistas nacionales e internacionales, así como también de diferentes curadores y amantes del arte. Por ahora se va a ver solo por instagram, pero la idea es que también se pueda recorrer con realidad virtual”, agrega POMS
“Con POMS lo que hicimos fue un ejercicio de pensar juntos cómo nos imaginamos la galería, qué cosas debían pasar. La oportunidad que te da el espacio virtual para democratizar y hacer más accesible el arte. Un espacio que no tiene limitaciones ni restricciones, el “no se reserva el derecho de admisión” es un tanto provocativo, pero en cierta forma una de las cosas que más me molesta del mundo del arte es ese snobismo, ese hecho de pertenecer a no sé qué.. Por eso quisimos destacar estos valores sobre los cuales se plantea la galería hacia adelante: No tiene derecho de admisión, no tiene horarios, la podés ver cuando quieras, no tiene tiempo de duración, eso es muy interesante”, me cuenta Vic Tolomei
“En concreto con esta exhibición, cuando POMS me convocó y me dijo cuáles eran los artistas, porque él ya había hecho un trabajo curatorial, me pareció que la propuesta giraba en torno al espacio. Los tres artistas vienen del graffiti, o sea vienen del arte urbano, pero particularmente del graffiti, eso es interesante. Y ahora se encuentran los tres en un espacio virtual, en una galería virtual, creada por un graffitero“
“Lo que me hizo pensar es que hay un cierto espacio compartido entre el arte digital, virtual, o lo que fueron los inicios del net art, y el graffiti. Por un lado porque son dos manifestaciones o dos lenguajes que están un poco desconsiderados del circuito tradicional, ya que los museos o galerías no se han hecho mucho cargo de estos movimientos, no los terminan de validar. Y por otro lado son artistas que tienen una intención compartida, que es la de ocupar un espacio, y es lo que me pareció súper interesante. En este caso, el graffiti como espacio físico, como material, de un tren a un mural, y en el caso del arte digital, o los artistas que trabajan en territorios virtuales, es el de ocupar un espacio virtual, pero que también conserva la intención e recordarnos que ese espacio es público”.
“Me parece que es una muestra que habla de eso, de esta intención de estos artistas que comparten esos inicios en el graffiti, y que hoy están explorando territorios diferentes, con esa intención de ir ocupando espacios y dejar esa voz que nos recuerda que hay espacios que tenemos que ocupar y hacerlos propios”