Jochi Cámara es una artista plástica nacida en Córdoba hace 30 años y que actualmente vive en Buenos Aires. Su curiosidad y admiración por el arte de vanguardia la lleva a explorar diferentes técnicas y expresiones como la ilustración, collage, la pintura y el muralismo. La naturaleza y los colores estridentes de sus obras definen su estética personal y refleja a la perfección su personalidad creativa, divertida y espontánea.
“Jochi Cámara es una joven intensa a quien desde niña le gustaba dibujar y pintar, y fue allí cuando supo que su camino estaba de la mano de las artes visuales”, así la describe la Licenciada en Gestión e Historia de las Artes Verónica Etchepareborda, en un ensayo sobre artistas contemporáneos. “Y es que el arte en su vida tiene un gran valor, siente que la define como persona y es su forma de expresarse, tanto como pintora, grabadora y fotógrafa”
“El verla crear sus cuadros contagia sus ganas, experimenta con collage de todo tipo, interviniendo con técnica mixta y el grabado. Implacable y divertida, desde allí nos invita a conocer lo que más le gusta, entretiene y libera. Se inspira en la música, las películas, las fotografías que toma en sus viajes, eligiendo formatos grandes para pintar e intervenir con collage, creando cuadros con una atmósfera alegre“
De personalidad ágil y extrovertida, Jochi nos habla de la generación a la que pertenece, multifacética y llena de ideas. La influencia de Matisse y Picasso en su obra es clara, la utilización de sus colores y formas dan cuenta de su admiración por estos artistas y el diseño gráfico también se hace presente en sus collages intervenidos.
“Esta artista tiene la fuerza necesaria para ser parte del circuito del arte porque tiene una capacidad de reinterpretar el entorno en el que se mueve de forma única y característica con elementos frescos e innovadores, pero sin escapar de claras referencias a técnicas y detalles que han sabido destacar a grandes maestros”, continúa Etchepareborda. “Su obra no termina en el lienzo. La vitalidad de los colores rodeados por trazos lacerantes genera un contraste de técnicas que obligan al espectador a recorrer su obra a fondo, intentando interpretar la dualidad que genera. Esa capacidad de trascender el marco le transfiere una fuerza atemporal que resaltaría en una galería. La composición de sus cuadros y el uso cautivante de los colores funcionan como un faro, donde la gente empieza a ver el cuadro antes de llegar ante él, lo disfruta cuando lo tiene enfrente, no puede evitar volver a mirarlo mientras se aleja y vuelve a pensar en el después de irse de la muestra”
¿Por qué es tan amena la obra de Jochi? Porque se conecta con la actualidad, con lo que la rodea de una manera armoniosa y buscando el lado positivo en lo que hace. ¿Por qué puede ser bien recibida en el mundo del arte? Por el alma joven que tiene, por la fuerza de trazo y por la impronta de sus obras. ¿Por qué es capaz de crecer en el medio? Porque tiene una iniciativa avasalladora…
Su obra es el reflejo de su estado de ánimo. Jochi danza con toda libertad junto a los colores, generando una gracia movediza de espíritu inquieto y alegre.