Mikko Lagerstedt es un fotógrafo autodidacta que, impresionado como tantos con los espectáculos de la noche, ha rendido su especial homenaje, creando imágenes extraordinarias que sueltan suspiros, que reflejan el esplendor del Universo, que invitan a reafirmar que existe algo más grande que nosotros mismo, que tanta belleza no puede ser sólo casualidad.
Lagerstedt empezó a dedicarse a las fotografías en el 2008, tras el despertar artístico en un verano mientras iba manejando a la cabaña de un pariente. Había sido un día lluvioso, salió el sol y la niebla se levantaba en los campos. Este momento fue trascendente. Los espectáculos de la naturaleza lo hechizaron, y decidió que a partir de ese momento debía capturar esos pequeños/grandes momentos.
Entre auroras boreales, carreteras que dejan de estar un poco menos solas bajo su sombra, árboles que adquieren nuevos colores al ser tocados por esta luz gloriosa, mares y ríos, que cual espejos imitan con arte su reflejo. Nubes que se alejan para no interrumpir la brillante ceremonia, humildes casas que parecen dignas de un rey con semejantes vistas. Toda ella, noche que es belleza, participa de estas sublimes fotografías.