El miércoles 13 de marzo, el mundo entero celebrará el Día del Riesling, y Doña Paula, la prestigiosa bodega de vinos de alta gama de Mendoza, se une a la festividad recomendando su exclusivo Doña Paula Estate Riesling (High Altitude). Este Riesling fresco y delicado es ideal tanto como aperitivo como para acompañar una amplia variedad de platos.
“Esta cepa está ganando cada vez más adeptos gracias a su versatilidad. Posee la capacidad de ofrecer una amplia gama de estilos de vinos, los cuales varían según la región de cultivo y el momento de la cosecha determinado por cada viticultor. Desde ejemplares ligeros y de consumo rápido hasta vinos excepcionalmente complejos, elegantes y con un gran potencial de guarda, como nuestro Doña Paula Estate Riesling.”, asegura Martín Kaiser, Gerente de Viticultura de Bodega Doña Paula.
El Doña Paula Estate Riesling es un varietal elaborado 100% con uvas provenientes de Finca Alluvia en Gualtallary (Tupungato, Valle de Uco). Atrae a los consumidores por su carácter complejo y delicado, presentando un color amarillo pálido con aromas a flores blancas, como jazmín, y notas cítricas. En boca, es fresco, mineral y con buena acidez.
Acerca del Riesling:
El nombre proviene de la palabra alemana “rüssling”, que significa “pálido”. Cultivada en Alemania durante cientos de años, la uva Riesling se considera una de las variedades más antiguas y nobles de uvas blancas en el mundo. La primera referencia escrita del Riesling data del 13 de marzo de 1435, originaria de la zona del Rin en Alemania y Alsacia.
El Día Internacional del Riesling se estableció en 2009 como una iniciativa del famoso sommelier estadounidense Paul Grieco, con el objetivo de celebrar y difundir la popularidad y versatilidad de esta variedad.
El Riesling es una uva blanca cultivada en diferentes regiones del mundo, originaria de Alemania. Los vinos producidos con esta uva pueden tener una alta acidez y una sensación en boca crujiente y refrescante, ofreciendo una amplia variedad de estilos, desde vinos secos y crujientes hasta vinos dulces y concentrados. Además, el Riesling es una uva muy transparente, lo que permite que la influencia del terruño y la técnica de elaboración sean evidentes en el vino final.
Con un color que varía entre el amarillo pajizo pálido y el amarillo profundo, y una alta acidez, es una uva que produce un vino blanco con gran potencial de envejecimiento. Se sirve frío, alrededor de 6°C.
Debido a su elevada acidez y frescura, los vinos Riesling son un acompañante ideal para tapas y verduras, especialmente aquellas con cierta dulzura natural. También armoniza perfectamente con platos de mar como el Sushi y el Ceviche, así como con platos picantes y especiados, quesos suaves y delicados, frutos secos y vegetales asados.