Del 21 al 25 de noviembre, en Mercedes, Provincia de Buenos Aires, llega la segunda edición de Amanita Festival: una experiencia transformacional que une música, arte, espiritualidad y comunidad en un entorno natural único.
Este año, Amanita presenta una nueva propuesta: una experiencia extendida del 18 al 20 de noviembre, con un formato más íntimo centrado en talleres, yoga y charlas. Esta edición coincide con un fin de semana largo, ya que el viernes 21 y el lunes 24 son feriados nacionales. Entradas y alojamientos disponibles
En un mundo que corre cada vez más rápido y se vuelve más digital, emergen espacios que buscan lo opuesto: pausar, respirar y volver a lo esencial. Amanita Festival es uno de esos espacios. Nacido en 2024 como el primer festival transformacional de la Argentina, este año regresa con una propuesta más ambiciosa y profunda: siete días de convivencia inmersiva, música, rituales, talleres y comunidad, diseñados para despertar la conciencia y sembrar nuevas formas de vivir.
La intención detrás del encuentro
Amanita es más que un festival: es un espacio liminal donde dejamos atrás las estructuras de la vida cotidiana para redescubrir quiénes somos y cómo nos vinculamos.
Agustín Berardo, fundador y director lo explica así: “Durante una semana nos disponemos a estar presentes, disfrutar, sorprendernos y conectar. Amanita es una invitación a recordar que existe otra manera de vivir, más auténtica, más humana, más compasiva.”
Música, arte y espiritualidad
El corazón del festival late al ritmo de una programación diversa: DJs internacionales y locales que recorren la música electrónica, orgánica y música medicina, ceremonias colectivas, clases de yoga, talleres de movimiento y tantra, bandas en vivo, performances, instalaciones artísticas y mucho más. Cada propuesta se integra con un mismo fin: expandir la experiencia humana y fortalecer la conexión comunitaria.
Siete universos de exploración
Durante siete días, los participantes podrán habitar múltiples dimensiones:
Yoga y Movimiento: yoga, biodanza, 5 ritmos, acroyoga, animal flow y ecstatic dance, entre otros.
Creatividad y Juego: talleres de arte, teatro, artes plásticas, escritura, jugar para reconectar con el niño interior.
Conocimiento y Sabiduría Ancestral: astrología, tarot, plantas medicinales, charlas y círculos de palabra.
Música y Rituales: DJs, música medicina, bandas en vivo y ceremonias.
Experiencias holísticas: tantra consciente, breathwork, meditaciones guiadas y viajes sonoros.
Comunidad y Vínculos Conscientes: espacios de encuentro, empatía y tejido comunitario.
Niños y Familias: propuestas inclusivas de juego, arte y movimiento.
Mirá el lineup completo en este link
Del 18 al 20 de noviembre, lo que sucede en Amanita no se limita a los días del festival: “Lo transformador no es solo la música o los talleres, sino lo que cada uno se lleva consigo. La vida compartida en la naturaleza, la cooperación en comunidad, la presencia en el momento: eso se expande después en la vida cotidiana. Muchos vuelven a casa con una mirada renovada sobre cómo se vinculan, cómo habitan su tiempo y qué sentido le dan a su vida” cuenta Agustín.
En Amanita se ensaya otra manera de existir: una donde la cooperación reemplaza a la competencia y el amor libre de juicio nos invita a vivir en el presente. Esa huella es la que convierte a Amanita en un verdadero festival transformacional.
Por qué lo hacen
Agustin resume la visión con claridad: “Creemos que en un mundo cada vez más digital necesitamos experiencias reales, más humanas. Espacios donde podamos mirarnos a los ojos, bailar juntos, compartir historias alrededor del fuego y recordar que estamos todos en esta misma experiencia. En definitiva: que somos uno.”
Con esta segunda edición, Amanita Festival 2025 se consolida como un referente cultural y espiritual en la región, un encuentro donde se acercan personas y artistas del todo el país con el propósito de explorar lo más simple y lo más profundo: otra forma de vivir, más presente, más auténtica, más conectada.
